El menhir o Ilso de Anguía está situado en el cordal del Ventoso, y ejerce de límite entre los municpios de Castro Urdiales y Guriezo, en la zona oriental de Cantabria, muy cerca de Bizkaia.
Se trata de uno de los ejemplos relevantes del fenómeno arqueológico del megalitismo tan característico del Patrimonio Cultural existente en el límite entre Cantabria y Bizkaia.
Se trata de un ortostato de arenisca de forma paralelepípeda, sin desbastados apreciables, en el que se observan diversos grabados cruciformes y otros más recientes. Mide 2,57 m de altura, 0,84 m de anchura y 0,35 m de grosor. Permanece hincado, aunque algo inclinado sobre el terreno.
La primera publicación bibliográfica data de 1959 recogida por los Gorrochategui cuyo artículo se titula: Nuevos dólmenes en la divisoria Vizcaya-Santander. Ya en los años 80 se señala por Yarritu y Gorrachategui en su «Catálogo de talleres y manifestaciones funerarias (dólmenes, túmulos, cromlechs y menhires) del Bronce y Hierro en el este de Santander» y más recientemente es publicado por Ruiz Cobo, Díez Castillo y López Quintana en Menhires/Monolitos: estructuras monolíticas en el sector central de la Cornisa Cantábrica con motivo del XXII Congreso Nacional de Arqueología y por Teira en su publicación del megalitismo en Cantabria.
Nuestra empresa, Tanea, con motivo del seguimiento arqueológico de la obra del gasoducto transcantábrico a su paso por este cordal, ha realizado la última actuación arqueológica hasta la fecha: documentación mediante escáner 3D del Ilso de Anguía.