Tras la reciente polémica generada en torno al acceso a la ‘capilla sixtina’ del arte rupestre, y en un año en el que el nombre de Altamira resonará con fuerza mediática a nivel internacional gracias a la película que se estrenará en primavera, los debates y reflexiones sobre la evolución de la cueva de Santillana adquieren renovado interés. En este contexto y tras el cambio de Gobierno en la comunidad se había reclamado públicamente la convocatoria del Patronato de Altamira. Finalmente la reunión de este organismo, en el que están representadas todas las instituciones implicadas en la gestión de la cueva, se convocará el próximo día 16 en la sede del Museo de Santillana. La última reunión tuvo lugar en Santander en marzo de 2015.
A finales del pasado año ya el consejero de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno cántabro, Ramón Ruiz, ya se refirió a la necesidad de convocar al Patronato –al que corresponde una cita por semestre–, con el objetivo de «valorar los avances en los estudios científicos para la conservación de las pinturas rupestres y concretar las próximas actuaciones para poner en valor un patrimonio cultural reconocido mundialmente». El Patronato de Altamira lo constituyen el Ministerio de Cultura, el Gobierno de Cantabria, el Ayuntamiento de Santillana, la Fundación Botín y el Centro Superior de Investigaciones Científicas, así como la UIMP y la Universidad de Cantabria.