2002
La puesta en valor el yacimiento romano-medieval de Camesa-Rebolledo, por iniciativa de la Consejería de Cultura de Cantabria con una finalidad didáctica y divulgativa, contemplaba la construcción de un segundo edificio para la recepción de visitantes concebido también como centro de interpretación con aparcamiento anejo.
La intervención arqueológica de dicho proyecto debía garantizar un control directo del terreno durante la fase de remoción de tierras ya que era previsible la localización de materiales y estructuras arqueológicas. Efectivamente la excavación de las zapatas para las cimentaciones del edificio y el aparcamiento puso al descubierto un buen número de tumbas pertenecientes a la necrópolis medieval que se excavaron y documentaron.
Posteriormente se realizaron labores de limpieza y consolidación del muro norte de la ermita prerrománica que permanecía sepultado y se asentaba sobre las estructuras romanas.
Se recuperaron materiales cerámicos (tanto terra sigillata hispanica, como cerámica común romana y medieval); el material metálico es poco representativo, apenas un buen número de clavos de época medieval que debemos relacionar con las cajas de madera de las tumbas y, lo más reseñable, un pendiente de bronce descontextualizado que, tipológicamente, parece situarnos en época romana.
